FESTIVAL DE REYES 1980

Que nervios...quedan dos días para el estreno. A pesar de q el año pasado fueron bien las cosas no puedo evitar estar nervioso. Hemos ensayado varios días y aunque los ensayos no estuvieran del todo muy bien tengo la seguridad de q actuar para la gente del pueblo siempre da resultados.
Hoy en casa me ayudarán a vestirme de Raphael, un pantalón negro, una camisa negra y unos zapatos negros... poco más. Todo estará en la interpretación. Voy a cantar en carne viva, tengo planeado y algo ensayado las maniobras q tendré q interpretar esta noche en el cine.
Se apagan las luces, comienza la música, hay expectación; suenan las primeras notas, me tiemblan las garrillas y los nervios inundan mi corazón. Conforme avanza la canción estoy más seguro, me siento artista, me dejo llevar por el momento y entro en un estado de alegría y de ilusión. Acaba la canción y los aplausos se amontonan dentro de mi alma, caen caramelos al escenario, pero no me agacho a cogerlos, es mi momento; no puedo perdermelo agachandome.
Al acabar la actuación recojo mi regalo de mano de los reyes, estoy curioso.
Me voy a casa feliz, vestido de raphael y entre felicitaciones. Ha sido mi primera actuación cara al público, me gustaría soñar esta noche con ello, con aplausos y felicitaciones que ahora no necesito y q en su día me hicieron muy feliz.
Felicidades de corazón a todos que haceis posible q el festival de Reyes regale la ilusión de siempre.

Quiero felicitar a Rubén por el maravilloso montaje de las fotos con los Reyes Magos. He de ser sincero y deciros q lo vi con la emoción q me faltaba estos días.
Siento mucho orgullo de pertenecer a ese grupo de gente; a mi pueblo y a mis costumbres. Simplemente gracias!